No es posible precisar con exactitud la época ni el lugar donde se fabricó por primera vez el hierro. La hipótesis más probable de su descubrimiento es debido a los restos de masas de metal recogidas en un violento incendio ocurrido en el año 4000 antes de JC. Esta hipótesis nació a partir del descubrimiento de un texto de Plinio el Veijo, Naturales Quaestiones. Así pues, nos encontramos con el nacimiento de la siderurgia que será la Ciencia del Hierro cuya finalidad es el estudio y realización de los procesos necesarios para la transformación de los diversos minerales de hierro en la infinidad de productos que tienen como base este metal, y todo esto de la forma más económica posible. Posteriormente al descubrimiento del hierro parece ser que los egipcios, 1.200 años antes de JC, ya cementaban el hierro rodeándolo de carbón y calentándolo a 1000 ºC, consiguiendo de esta forma, un mayor contenido de carbono en la superficie y aumentando la dureza, habían obtenido, pues el primer acero. Los aceros los consideramos como aleaciones de hierro y carbono que se caracterizan por no exceder el carbono del límite de solubilidad en el hierro. Estas aleaciones de hierro y carbono, que llamamos aceros, además de estos dos elementos están compuestas, normalmente, por cantidades variables de manganeso, silicio, fósforo y azufre, principalmente. Posteriormente, por la adición de otros elementos, se obtuvieron infinidad de tipos de aceros, entre los que destacan los aceros especiales que responden a la exigencia actual de la técnica. Asimismo, los egipcios, hacia el año 900 antes de JC descubrieron el fenómeno del temple, observando que la dureza con que quedaba el acero después de él era extraordinaria. Hacia el año 700 antes de JC los egipcios también conocían el revenido como se demuestra en los diversos objetos encontrados y que datan de esa época por lo que se ha podido determinar sus conocimientos sobre la cementación y los tratamientos térmicos. Los etruscos utilizaron hornos bajos abiertos así como los romanos que lo difundieron por otros países como España, Galia y Bretaña. Pudiendo agregarse que estos procedimientos son los que han producido el hierro durante toda la edad media hasta el siglo XIV con ligeras modificaciones. Es curioso señalar que los primitivos procedimientos de fabricación de acero en crisol y por cementación, se perdieron lo mismo que las antiguas civilizaciones y nacieron otra vez después de ser olvidados e ignorados por los pueblos de la edad media. Posteriormente, podemos enumerar como fechas importantes para la siderurgia por sus descubrimientos las siguientes, por