2. El Marketing personal es una herramienta que te permite
construir tu propia imagen, conocerte, generar credibilidad y
confianza ante las personas que te rodean, para de esta
forma lograr hacer de nuestro nombre y profesión una
marca, un producto que pueda satisfacer necesidades y
deseos. Pero ¿como hacer de nuestro nombre y
profesión una Marca Personal?.
3. Pasos para hacer de tu nombre y tu
profesión una Marca Personal.
1. Definición del ámbito de posicionamiento. ¿En qué
entorno quieres posicionarte? ¿Qué posicionamiento
quieres conseguir? ¿En el empleo actual? ¿Cómo
experto? ¿Cómo imagen de marca de tu empresa?
4. 2. Establecimiento de objetivos. Definir qué es lo que
queremos conseguir. Un ascenso, una vida más tranquila,
más prestigio, un empleo, ser reconocidos como los expertos
en alguna materia,… ¿Qué meta pretendes alcanzar con ese
posicionamiento? ¿Un ascenso? ¿Una reputación como
especialista?
5. 3. Elaborar un diagnóstico. A partir del análisis se analizan
diferentes opciones y nos ponemos a diseñar nuestro
posicionamiento personal o profesional. Establecer la
situación inicial. Analizar cuál es nuestro punto de partida,
cuáles son nuestras fortalezas, nuestras debilidades, aquello
de necesitamos, nuestros recursos, etc.
6. 4. Definición de oferta profesional. ¿Qué puedo
ofrecer? ¿Qué me hace útil y relevante? ¿Qué consigue
mi “cliente” al seleccionarme? ¿Como se beneficia mi
empresa, cliente o entorno de mis cualidades? No se
trata de hacer una lista de características (CV) sino de
beneficios (lo que otro puede conseguir si me elige).
Diseñar nuestro “producto”. Identificar aquello que nos
gusta y que podemos y sabemos hacer y convertirlo en
una contribución valiosa para los demás.
7. 5. Descubrir y gestionar las percepciones. Debemos saber
cómo nos están percibiendo y hacer los ajustes necesarios
basándonos en nuestra autenticidad.
8. 6. Generación de confianza. Vale, soy un/a buen/a
profesional. Pero ¿Por qué tendrían que confiar en mí?
¿Cómo pruebo que lo que digo es cierto? ¿Qué herramientas
tengo para demostrar que no me estoy “marcando un farol”?
9. 7. Diferenciación. Aunque cuando se habla de marca
siempre suele aparecer el concepto de diferenciación, suele
entenderse mal. No se trata de ser “raro” o extravagante sino
de ser percibido como alguien que se distingue por hacer las
cosas mejor. Ese es el elemento que marca la diferencia.
10. 8. Darnos a conocer. Una vez que sabemos lo que podemos
ofrecer y la forma en que queremos transmitirlo, debemos
utilizar todas las herramientas de visibilidad a nuestro
alcance. Internet, relaciones personales, artículos, blogs,
libros,… En este momento podemos llegar, literalmente, a
todo el mundo. Comunicación. Aquí es donde entran en
juego más herramientas porque es el momento en el que hay
que darse a conocer y hacer visible tu oferta. Hay tres
niveles:
11. 1. Corto alcance. Se trata de las relaciones personales
directas, las redes sociales o simplemente la charla de café o
la conversación con el jefe o colegas. Es la mejor forma de
posicionarse y todas las demás herramientas de notoriedad
(Internet, artículos, conferencias,…) deben estar enfocadas a
conseguir ese contacto directo. Es el 1-1
12. 2. Medio alcance. Son las conferencias, charlas,
presentaciones o cualquier forma de dirigirse a un grupo de
personas tanto dentro de una empresa como fuera de ella. Es
una buena forma de posicionarse como un referente. Es el 1-
varios.
13. 3. Largo alcance. Es la gran herramienta de visibilidad y lo
que ha cambiado todo, pero no hay que obsesionarse con
ellas. Es Internet (blogs, redes sociales virtuales, vídeos,
herramientas 2.0,…) pero también son artículos en prensa,
libros, aparición en medios,… Es el 1-todos y su finalidad es
posicionarte a un nivel global pero siempre como forma de
posicionarte en tu sector, de ser un referente y de aparecer
como tal en los buscadores y en los medios online.
14. • ¿Cuánto se tarda en conseguir
resultados?
Depende del alcance que quieres conseguir con tu
posicionamiento. En cualquier caso, este es un proceso de
crecimiento y se notan mejoras desde el primer momento.
Por concretar un poco más, en un caso típico, si se “hacen
los deberes” deberían verse resultados en un plazo de entre 3
y 6 meses.