Este documento presenta una guía sobre terapia de parejas. Explica que la terapia de parejas busca tratar problemas conyugales cuando una relación está deteriorada. Describe cuatro esquemas matrimoniales patológicos y deriva valores normales del matrimonio como la capacidad de cada cónyuge de valerse por sí mismos y apoyarse mutuamente. También cubre temas como la selección del tratamiento, el rol del terapeuta y la importancia de la empatía.
2. Un terapeuta de parejas es aquel que opta
por tratar a personas que presentan
problemas conyugales.
Cuando una pareja tiene problemas en su
relación y no logra solucionarlos sino que
se van manteniendo en el tiempo, llega un
momento en que dichos problemas
empiezan a deteriorar la relación cada vez
más, generando insatisfacción y pudiendo
llegar a romperla.
Es entonces cuando algunas parejas
deciden acudir a un psicólogo para realizar
una terapia de pareja que les ayude a
salvar su relación.
3. La terapia de parejas pone de relieve el
vínculo destructivo y facilita los cambios
constructivos.
El paciente está atado no solo a su propia
dependencia y angustia, sino también por
las poderosas fuerzas emocionales
aterrador. Ej.: Violencia física, intento de
suicidios, descompensación emocional,
abandono o divorcio, de manera tal que es
imposible llevar a cabo un análisis
continuado.
4. ESQUEMAS PSICOLÓGICOS Y VALORES
NORMALES EN EL MATRIMONIO
La descripción de los tipos de matrimonios
psicopatológicos nos permiten inferir cuales
son los valores normales en el matrimonio;
y a su vez estos valores ponen de relieve los
cambios necesarios para establecer un
esquema matrimonial sano.
Se describe cuatro esquemas matrimoniales
patológicos tales como:
5. •La esposa enamorada y el marido frio
Este esquema el de la esposa histérica y
el marido obsesivo es el problema
psicopatológico más común y difícil.
La esposa es la primera que acure a
buscar tratamiento porque sufre de
depresiones, angustia grave y síntomas
físicos.
Los maridos, su cuadro clínico contrasta
con el de la esposa, son hombres
inteligentes y educados que ocupaban
puestos de responsabilidad
profesionalmente brillantes.
6. •El marido en busca de una madre
El marido histérico y la esposa obsesiva el
hombre recurren al terapeuta porque
ocurre una crisis en su matrimonio,
mantienen la relación con otra mujer con
la que piensa casarse pero circunstancias
externas a él obstaculizan sus planes.
El cuadro de este tipo de problemas se
divide en dos grupos, el 20% hombres
activos dominadores, y el 80% pasivo y
dependientes.
7. •El matrimonio de dos paracitos
Estos matrimonios están constituidos por
dos cónyuges pasivo dependiente, dos
personas que, al no poder nadas, aferran
desesperadamente a la una a la otra y se
ahogan conjuntamente.
Cada conyugue espera que el otro asuma
la responsabilidad de hacer que el
matrimonio funcione, pero ninguno es
capaz de crecer, ni de satisfacer las
necesidades.
8. •El matrimonio paranoide
Este tipo de matrimonio clínicamente es
perturbador. El paranoide es el mejor que
pone de manifiesto la necesidad de
separarse e individualizar a cada
conyugue.
La paranoia conyugal es la que los delirios
paranoides y las actitudes patológicas han
sido dirigidos contra el otro cónyuge.
9. VALORES NORMALES DEL MATRIMONIO
DERIVADOS DE LOS ESQUEMAS
PSICOPATOLÓGICOS
El esquema matrimonial (esposa
enamorada-marido frio), es el factor
patológico sobresaliente era la
incapacidad de la esposa para bastarse a
sui misma. Al soportar la soledad no
podría valerse por sí misma.
La patología del marido frio es la
ineptitud para tolerar la intimidad;
abrumada la necesidad de la intimidad de
la esposa.
10. El esquema matrimonial del marido en
busca de una madre es el hombre pasivo
que es incapaz de valerse por sí mismo,
de ser independiente y mantener
funciones cognitivas sin ayuda de otra
persona.
Un matrimonio sano es una unión de dos
personas que son capaces de valerse por
sí misma y apoyarse el uno al otro, y que
se comprometen a mantener dicha unión.
Estos son valores normales.
11. Variaciones sobre temas sexuales que
aparecen en el tratamiento de
problemas maritales como los presentan
los pacientes
•Apetito Carnal
Es el coito per se, sin intimidad física
(sensualidad emocional o amor).
Esposa: mi marido es como un
camionero, llega a la casa y fornicamos,
no hay conversación, ni caricias, ni
preparación, es un animal. Lo único que
quiere es copular. Los besos me encantan
(esposa enamorada que necesita de la
intimidad física y emocional para
sobrevivir).
Marido: Mi esposa dice que no me
aguanta más. No quiere ninguna
intimidad cuando se la pido, ella fornica
conmigo sin preámbulos (marido pasivo
en busca de una madre con una esposa
dominante o matrimonios paranoicos.
12. •Intimidad
Es la intimidad física (sensualidad) y
emocional (amor), sin acto sexual.
La esposa: El es un gran amante, los
escarceos previos duran unas horas.
Marido: Ella es formidable cuando se
trata de besarme, abrazarme y mantener
conversaciones románticas, pero es
incapaz de practicar sexo.
•Intimidad emocional denominada amor
Aquí esta de manifiesto el dialogo, la
admiración, adoración, excitación interna,
anhelo por el otro.
13. EL CONTRATO MATRIMONIAL
La comprensión del contrato matrimonial
contribuye a dar forma a la entrevista
iniciales de diagnostico, a esclarecer el
contrato de la terapia que cada conyugue
concertará con el terapeuta y a
ejemplificar una de las técnicas de la
terapia de parejas.
Un contrato matrimonial que permite la
satisfacción de las siguientes expectativas,
dará como resultado la armonía conyugal.
El instituto de la familia y la sociedad
burocrática, dice que el contrato personal
es una nueva forma de vínculo
matrimonial con las siguientes
estipulaciones:
14. División de los queseares domésticos.
1. El uso del espacio vital.
2. Responsabilidades de cada conyugue
en la crianza, educación y
socialización de los hijos.
3. Propiedades, dudas y gastos diarios.
4. Dedicación a la profesión y domicilio
legal.
5. Derechos de herencia.
6. Uso de los apellidos.
7. Gama de relaciones permisivas con
terceros.
8. Obligaciones de la diada marital en
diferentes aspectos. (el trabajo, la
comunidad, la vida social, etc.)
9. Motivos de separación o divorcio.
10. Duración y negociabilidad del
contrato inicial y los subsiguientes:
• Fidelidad sexual y relaciones
extramatrimoniales.
• Posición asumida en cuanto a la
procreación o adopción de los hijos.
15. ENTREVISTA INICIALES DEL DIAGNOSTICO
El método y contenido de la entrevista
inicial varían de un terapeuta a otro. El
terapeuta de pareja, para quien es el
paciente es el matrimonio, encara la
historia clínica centrada en las
dificultades conyugales.
SELECCIÓN DE LA TERAPIA
La circunstancia en las que se
recomiendan la terapia de parejas es
innecesaria cuando hay tiranía del ideal,
matrimonios que no funcionan bien.
Otras veces se rechaza una pareja que
solicite tratamiento porque su
matrimonio ya no tiene arreglo.
16. CIRCUNSTANCIA QUE SE RECOMIENDA LA
TERAPIA
Se recomienda la terapia a la persona que
sea capaz de asumir responsabilidades
para que funcione.
La terapia de pareja no se limita a tratar
pacientes con problemas psicosociales,
también se ocupa de los pacientes
psicóticos.
17. SELECCIÓN DEL TRATAMIENTO PARA
LOGRAR CAMBIOS
•Terapia orientada hacia la persona
•En este tipo de terapia unos o ambos
conyugues están bajo tratamiento.
•Terapia orientada hacia el matrimonio
•Aquí se resuelve aquellos problemas que
interfieren en la armonía del matrimonio.
•Terapia de orientación combinada
•Está orientada hacia la persona y el
matrimonio, el paciente debe asumir
responsabilidad del cambio individual.
•Terapia sexual
•Esta técnica conductual
(condicionamiento operante)
contingencia contractuales y asignaciones
de tareas.
18. EL TERAPEUTA DE PAREJAS
Los terapeutas de parejas provienen
de muy diversas disciplinas; su
formación, experiencias, capacidad y
propósitos difieren notablemente
entre sí.
19. LA EMPATÍA EN EL TERAPEUTA DE PAREJA
La empatía es muy importante, es la
herramienta primordial, es la que lleva al
paciente a evocar una buena catarsis.
Shapiro (1974) presenta 5 experiencias
humanas posibles como:
•El individuo no admite su percepción de
los sentimientos del otro.
•Percibe los sentimientos del otro pero no
comprende el motivo.
•Percibe los sentimientos el otro y reconoce
dos cosas: que el tiene o sentiría igual, y
que la congruencia de sentimientos se basa
en una circunstancia especifica.
•Le basta observar al otro para reconocer
que el siente igual, aunque desconozca el
agente causal.
•Está convencida de que siente igual que el
otro, sea cual fuere la circunstancia o
expresión que este.